Dr. Víctor Hugo Olmedo Canchola

Coordinador de Comités Académicos, DEP Facultad de Medicina, UNAM

victor.olmedo@fmposgrado.unam.mx


M en A Mauricio Olmedo Sabater

Director de Consultoría para Evaluación y Capacitación


Introducción

Evaluar, en términos coloquiales, implica emitir un juicio de valor sobre algo en particular. En la vida cotidiana, esta actividad lleva una gran carga de subjetividad, por lo que en muchas ocasiones esos juicios de valor suelen ser heterogéneos y, por lo tanto, carentes de utilidad por no sustentar ninguna validez.

En el ámbito profesional, estamos acostumbrados a que evalúen nuestros conocimientos desde etapas tempranas de nuestra instrucción y, por ello, tendemos a creer que somos expertos en evaluación. Sin embargo, es importante reflexionar en que la evaluación es un proceso sistemático complejo y siempre hay espacio para mejorar. Para poder evaluar efectivamente el conocimiento de los estudiantes, debemos estar familiarizados con diversas herramientas y estrategias de evaluación. Además, debemos ser capaces de seleccionar la herramienta idónea en cada situación. Con la finalidad de allanar el camino de la evaluación y promover evaluaciones de calidad, se han creado los estándares de evaluación.

Para CONACEM, los estándares son importantes en la evaluación porque proporcionan un lenguaje y un marco común para comprender y evaluar el aprendizaje de los médicos especialistas. Sin estándares, se vuelve casi imposible comparar y contrastar el trabajo de los estudiantes, determinar el su progreso de los estudiantes a lo largo del tiempo, o la utilidad y factibilidad de programas educativos.

Estándares de evaluación educativa

Los estándares de evaluación educativa son una herramienta para apoyar el ejercicio profesional de los evaluadores que proporcionan conceptos clave, normas y orientaciones para su uso. Son estándares para la práctica que se establecen tras largos procesos de análisis, discusión, revisión y evaluación en los que participan distintas organizaciones y numerosos grupos de evaluadores.

Entendemos, entonces, que un estándar de evaluación educativa: es una norma que ayuda al evaluador a decidir especificaciones y procesos que deben seguirse en una evaluación particular, por ello contribuye a que la evaluación se dé en un marco de calidad y responsabilidad; por lo que, al seguir los estándares, se tendrá una evaluación válida y confiable, libre de subjetividad y sesgos.


Estándares Internacionales sobre evaluación eduvativa

En la actualidad existe una amplia bibliografía enfocada a los estándares educativos para diferentes áreas; sin embargo, consideramos que los más completos son los siguientes:

Los Estándares de Calidad desarrollados por CONACEM siguen las recomendaciones establecidas en la bibliografía previa, y las adapta para el entorno específico de la evaluación de los médicos especialistas para la certificación y recertificación.

Evaluación para certificación en las especialidades médicas

Al evaluar a los médicos de una especialidad con fines de certificación, se deben considerar varios factores para poder emitir un juicio preciso. Estos factores pueden incluir el nivel de experiencia, educación y cualquier otra información relevante de la persona que pueda usarse para medir su nivel de dominio en el rubro que se evalúa. Los métodos de evaluación varían según el tipo de conocimiento que se evalúa, pero los métodos comúnmente utilizados incluyen pruebas, carpetas y simulaciones.

En la examen de la certificación,
los sustentantes deben demostrar dominio
del contenido para alcanzar un nivel determinado
de competencia, de no alcanzar el criterio
preestablecido no logrará obtener su certificado

Las consecuencias de no lograr la certificación pueden ser catastróficas para los médicos especialistas; considerando que han invertido un mínimo de 17 años de su vida en estudiar y que al final no se le permita ejercer la especialidad porque no puede obtener una cédula profesional al no estar certificado. Eses un escenario terrible que involucra aspectos económicos, profesionales, familiares y emocionales.


Precisamente para garantizar que la evaluación
a la que se somete el médico que pretende certificarse
es confiable, ética y responsable, se requiere la utilización
de estándares de evaluación.