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EDICIÓN

ENERO - ABRIL 2024

NÚMERO 8


LOS MÉDICOS GENERALES

Enfermedades más frecuentes

de la comunicación humana en niños

Dra. María del Carmen Rojas Sosa

Audiología, Otoneurología y Comunicación Humana

mc_rojass@yahoo.com.mx

Dr. José Luis Olvera Gómez

Coordinador de Oficina del Comité Normativo Nacional de Medicina General, A.C.

j.luis.olvera@conamege.com

Introducción


El médico general es fundamental para la atención de al menos 80% de los padecimientos que aquejan a las personas con o sin derechohabiencia en nuestro país, dentro de ellas se encuentra la población pediátrica. Es pertinente mencionar que desde la semana 23 de gestación los órganos auditivos están completamente desarrollados y listos para percibir los sonidos, estos órganos son fundamentales para la adquisición, ya en su vida extrauterina, del lenguaje y la comunicación así como para el desarrollo cognitivo, elementos esenciales en la interacción social y el éxito académico, en el desarrollo emocional y la calidad de vida; la detección y manejo de trastornos de la audición permite prevenir futuros problemas como retrasos de lenguaje y dificultades de aprendizaje. 1, 2, 3

La hipoacusia en la infancia es una condición de salud pública global que afecta a un número significativo de niños en todo el mundo. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que aproximadamente 466 millones de personas en el mundo presentan déficit auditivo, identificando que hasta 10% de la población presenta algún grado de sordera y 2 de cada 1,000 personas tienen hipoacusia profunda, alrededor de 34 millones son menores de 15 años con hipoacusia discapacitante; en los recién nacidos que estuvieron en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) el riesgo de sordera se incrementa hasta de 1 en cada 52 a 67, lo que resalta la importancia de la detección y tratamiento oportunos. 4

Pruebas subjetivas para identificar la hipoacusia


Evaluación del comportamiento auditivo: este método implica observar las respuestas del niño a estímulos como sonidos o palabra hablada. Por ejemplo, mediante el reflejo de sobresalto, el niño reacciona al sonido con movimientos físicos buscando la fuente del sonido. 5

Las respuestas a estímulos con juguetes sonoros han sido una herramienta útil para evaluar la audición desde hace más de medio siglo, en cada grupo de edad la respuesta esperada en general es la siguiente: 6

  • Meses 0 a 4: dilatación de la hendidura palpebral, movimiento claro de parpadeo.
  • Meses 4 a 7: respuesta con giro rudimentario de la cabeza, desplazamiento horizontal o vertical de la mirada.
  • Meses 7 a 9: fija la fuente sonora cuando se encuentra arriba de la cabeza.
  • Meses 9 a 13: pasa de localización indirecta a directa hacia arriba, al año ya localiza en cualquier plano.
  • Meses 13 a 24: las respuestas de orientación al sonido desde los 13 meses hasta los dos años son casi las mismas, la maduración del comportamiento auditivo infantil no experimenta modificaciones en este periodo.

Estudio audiológico condicionado: se utilizan tonos puros de diferentes frecuencias y niveles de intensidad para determinar el umbral auditivo del paciente. El examinador observa sus respuestas, como movimientos de cabeza o reacciones faciales, para determinar en qué punto el paciente puede escuchar el sonido. 7

Pruebas objetivas para identificar hipoacusia


En México, por ley, desde el 2011 debe de efectuarse a todos los recién nacidos el estudio de tamizaje auditivo.

Tamiz auditivo neonatal: Esta prueba es trascendental para la detección de la hipoacusia desde recién nacidos, se realiza preferentemente antes de que el paciente sea egresado del hospital. Mediante un dispositivo se presentan sonidos suaves a través de auriculares colocados en los oídos del bebé mientras duerme o descansa y se registran las respuestas del oído interno, dicha respuesta está constituida por las emisiones otoacústicas (EOA) provocadas por los estímulos sonoros. Esta prueba tiene una sensibilidad de entre 95 y 98% y una especificidad de entre 94 y 99% para la detección de la hipoacusia uni o bilateral.2 Si se identifican resultados anormales en las respuestas uni o bilaterales, se procede a efectuar los PEATC o los PEAEE.

  • Potenciales evocados auditivos de tallo cerebral (PEATC):

    Los potenciales evocados auditivos de tallo cerebral son una serie de respuestas eléctricas registradas en el cerebro en respuesta a estímulos sonoros (se colocan audífonos en los oídos para el registro de electrodos de acuerdo con el sistema 10/20 del electroencefalograma). En el contexto de la evaluación auditiva infantil, estos potenciales se utilizan para medir la función del sistema auditivo desde el oído interno hasta el tronco encefálico, confirman la presencia de hipoacusia y su gravedad (desde hipoacusia superficial hasta anacusia). 2, 6, 7

  • Potenciales evocados auditivos de estado estable (PEAEE) o electroaudiometría:

    Los potenciales evocados auditivos de estado estable son otra herramienta importante en la evaluación auditiva infantil. A diferencia de los PEATC, que evalúan solamente las respuestas del sistema auditivo a estímulos únicos y de las frecuencias agudas, los PEAEE miden las respuestas del cerebro a estímulos auditivos continuos, como tonos puros, y proporciona información sobre el umbral auditivo del paciente de varias frecuencias específicas. 6, 8

Alteraciones del lenguaje en niños


El lenguaje es el sistema de comunicación entre los seres vivos, habitualmente de la misma especie, con base en designaciones simbólicas de objetos, relaciones y actividades, cuyos significados son aprendidos y compartidos. El habla es la parte audible o articulada del lenguaje, logrado mediante el movimiento de labios, lengua, paladar y faringe, con la participación de la laringe y el sistema respiratorio, todo organizado por el cerebro. Una de las clasificaciones del desarrollo del lenguaje más frecuentemente utilizadas divide en etapa prelingüística (del nacimiento a los 2 años) en la que el niños presenta balbuceo, vocalizaciones, sílabas repetitivas, palabras aisladas e incompletas y, en ocasiones, palabra-frase, es decir, 2 o más sustantivos, verbos o adjetivos, sin uso de conectivos, con los cuales el niño intenta expresar una idea compleja; el balbuceo es el primer intento de comunicación, puede presentarse muy temprano, desde los primeros meses e ir diferenciándose poco a poco hacia el laleo y vocalizaciones. En la etapa lingüística (2 a 4 años) aumenta el vocabulario con velocidad y aparece poco a poco el uso de artículos, pronombres, preposiciones y conjunciones; en este periodo se enriquece el vocabulario y se refleja las enseñanzas de su medio ambiente, destacando la importancia de la comunicación con la madre. 9 En la etapa postlingüística temprana (4 a 7 años) y tardía (7 a 12 años), se alcanza prácticamente un repertorio lingüístico similar al del adulto, pero de menor léxico que se irá incrementando poco a poco. 10

En la escuela, el lenguaje se vuelve la base sobre la que se inicia el aprendizaje, sobre todo la lectoescritura y el repertorio se usa para transmitir e interpretar conocimientos a través del habla. Sobresale el desarrollo de análisis, síntesis y mecanización de lo aprendido. En esta etapa resulta difícil modificar las deficiencias, pero si se detectan tempranamente podría presentarse una recuperación del patrón articulatorio y el uso sintáctico-semántico normal. 10-12 No obstante, la existencia de los aspectos cronológicos del desarrollo, el paciente debe ser evaluado y diagnosticado por el médico, considerando una gran cantidad de factores físicos, familiares, externos e incluso genéticos, el tratamiento debe ser proporcionado por un terapeuta del lenguaje calificado. 13

Trastornos de aprendizaje


El Comité Nacional Conjunto sobre Discapacidades del Aprendizaje (the National Joint Committee on Learning Disabilities –NJCLD-) define las dificultades de aprendizaje como una falla inesperada, específica y persistente para adquirir habilidades académicas competentes a pesar de la instrucción convencional, la inteligencia adecuada y las oportunidades socioculturales. Entre 5 y 9% de los niños en edad escolar tienen dificultades con la lectura, la escritura y las matemáticas. 14 El desarrollo inadecuado del habla-lenguaje puede ser indicador de mal funcionamiento cerebral, que puede provocar alteraciones tardías en el comportamiento y en el aprendizaje. 15 Por otra parte, los procesos multisensoriales (audición, visión, sensibilidad, olfacción) son esenciales, en niños y adultos, para construir una percepción coherente y unificada del mundo, por lo que constituyen la base para el aprendizaje y las interacciones sociales. 16

Los niños pueden desarrollar una mala autoestima y peor rendimiento. El médico debe evaluar las dificultades con tareas, lectura, habilidades y razonamiento matemático y comunicación oral y escrita. La valoración debe incluir historia clínica y examen físico completos para detectar afecciones médicas y trastornos mentales que puedan manifestarse o coexistir con las discapacidades de aprendizaje. También deben solicitarse pruebas para evaluar los problemas de aprendizaje. El tratamiento requiere programas de educación individualizados con estrategias educativas, terapia del habla u ocupacional y herramientas de adaptación, así como el apoyo de la dinámica familiar y psicológica para el menor. 17

Trastornos de la voz


La voz es el sonido que se produce cuando el aire es exhalado desde los pulmones a través de la laringe y provoca la vibración de las cuerdas vocales; tiene las cualidades calidad, timbre e intensidad; esto requiere la sincronización de la función diafragmática y laríngea, así como la configuración del sonido por parte de la lengua, las mejillas y los labios. La voz es un medio fundamental de comunicación humana e interacción social, por lo tanto, la pérdida parcial o total de la voz puede tener profundas implicaciones para la calidad de vida y la seguridad personal. 18

La disfonía en niños tiene una prevalencia entre 6 y 23%, por lo que, para el diagnóstico diferencial, se recomienda evaluar a los niños con métodos de visualización laríngea. Mediante la laringoscopia se detectó que en niños de 0 a 18 años 40% correspondió a nódulos vocales, 26% a quistes de cuerdas vocales y el resto a un grupo menos frecuente. En general se requiere un equipo multidisciplinario para la correcta valoración y manejo de las alteraciones de la voz en población pediátrica. 19 Existen otros factores que deben tomarse en cuenta debido a su papel en la producción de la voz, como la tensión muscular y la postura corporal. 20

Otro trastorno de la voz, preocupante para la familia, es cuando un niño persiste con una voz de características prepuberales o puberales (también conocida como falsa muda vocal o puberfonía) hasta la adolescencia o incluso hasta la edad adulta. Esta disfonía suele acompañarse de tensión muscular y en la laringoscopia puede observarse constricción supraglótica, suele relacionarse con factores psicológicos y en ocasiones el examen laringoscópico es normal. 21

Referencias Bibliográficas


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