En los últimos años ha crecido la preocupación por el cambio climático, pues ya es una realidad que no debemos soslayar sino actuar y tomar conciencia de este. Esto afecta al planeta y desafortunadamente provoca contaminación ambiental y disminución en la biodiversidad de las especies, volviéndose una amenaza constante en la salud de la población, incrementando muchas enfermedades crónicas entre las que se incluyen las alérgicas. 1

Impacto del cambio climático en las enfermedades alérgicas

El impacto observado en las últimas décadas por el cambio climático sufrido por el incremento de los niveles de contaminantes ambientales contribuyendo a la mala calidad de aire en las ciudades es provocado por el desarrollo industrial, el aumento de los vehículos de motor de combustión interna y la desafortunada tala de árboles, además de la urbanización de las ciudades; esto tiene consecuencias graves como el incremento de la morbilidad, exacerbación y mortalidad de las enfermedades alérgicas. Incluso el asma, la rinitis y la conjuntivitis alérgicas han incrementado su incidencia y prevalencia hasta 40%. 2

El exposoma da cuenta de la totalidad de la exposición humana a factores ambientales y consta de tres factores que podemos observar en la siguiente tabla. 3

Se ha observado que la exposición a contaminantes ambientales tanto intra como extramuros son un problema importante de salud pública que afecta a cualquier individuo sin discriminar edad ni sexo. De hecho, los contaminantes ambientales actúan sobre el sistema inmunológico y respiratorio en desarrollo, por lo que pueden existir efectos negativos sobre la maduración estructural y funcional del aparato respiratorio en los niños. 4,5

Las consecuencias de los contaminantes sobre la salud dependerán del tipo de contaminante, tamaño de partícula, concentración y solubilidad. También influye el tiempo de exposición, la capacidad de reaccionar con otros contaminantes y generar sustancias más tóxicas, la edad y la susceptibilidad individual. Estas sustancias interactúan con el sistema inmune e inducen cambios epigenéticos proinflamatorios, lo que puede causar, desencadenar o agravar numerosas enfermedades. 6

¿Cómo influye el cambio climático en los alérgenos?

El cambio climático ha influido en las exacerbaciones de las enfermedades alérgicas, asociadas a la exposición de alérgenos extramuros; por lo que los altos niveles de contaminantes atmosféricos, como el caso del dióxido de carbono (CO2), han llegado a 400 ppm en comparación con la época preindustrial con 280 ppm. 7 Estos cambios en el ambiente y la creciente concentración de dióxido de carbono en la atmósfera pueden inducir: 8

La concentración de polen alergénico influye en el grado de los síntomas en los pacientes; sin embargo, la relación entre la exposición al alérgeno, la inflamación de las vías respiratorias y los síntomas clínicos es compleja y están implicados otros factores, además de los alérgenos. 8,9

El impacto del calentamiento global y las alergias alimentarias.

El aumento de la temperatura está provocando una floración más temprana y prolongada y una mayor dispersión del polen en el aire, volviendo la temporada de síntomas mucho más duradera en los pacientes. Por otro lado, una polinosis, o sensibilidad al polen, supone una mayor posibilidad de sufrir alergia alimentaria debido a la reactividad cruzada de alérgenos comunes en ambas fuentes. Además, el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero induce la expresión de determinados alérgenos, alterando su concentración tanto en polen como en los alimentos de origen vegetal directamente.

Como consecuencia del cambio climático se ha producido una menor biodiversidad en el ambiente y en la microbiota que está presente en algunos alimentos, lo que resulta en una considerable reducción del número de antígenos a los que está expuesto nuestro organismo, alterando nuestro sistema inmunitario y afectando potencialmente su capacidad de tolerancia.

Se ha observado que la reducción en la diversidad de alimentos en nuestra dieta, especialmente en las primeras etapas del desarrollo, se asocia a una mayor predisposición a desarrollar alergias alimentarias. La disbiosis consecuente, y estos cambios en la dieta, entre otros factores, y está directamente relacionada con el desarrollo de sensibilizaciones alimentarias. 10

Debemos tener en cuenta que el cambio climático es un gran problema que está afectando a toda la población mundial, que no solo afectará a las futuras generaciones. Por lo tanto, es urgente que actuemos tanto en lo individual como en lo colectivo, de lo contrario seguirá afectando la salud humana, no solo en el caso de las enfermedades crónicas infecciosas o no infecciosas, como las alérgicas. Nuestro organismo ha tenido una gran capacidad de adaptación durante varias generaciones, por lo que, con el cambio climático y el calentamiento global, las enfermedades alérgicas han incrementado.

Es importante que trabajemos para disminuir o frenar el cambio climático y para que podamos contribuir a salvar nuestro planeta; además de hacer un cambio importante para que no siga disminuyendo la biodiversidad de especies, y de esa manera proteger nuestra salud. Debemos tomar conciencia de todas las afectaciones de salud pública urgentes que atender. Tenemos una gran responsabilidad como médicos, pero también como individuos ya que debemos proteger a las personas que padecen enfermedades alérgicas y a la población en general.